¿Está suficientemente expandido el uso de las nuevas tecnologías en las ONG?

Puff, qué complicado. En realidad creo que planteado así el debate no puede ser válido porque las ONG son tan diversas que no se pueden agrupar bajo una sola etiqueta: asociaciones pequeñas, fundaciones enormes, federaciones con poco personal pero que dan servicio bajo su paraguas a muchas otras… Con las que trabajamos diría que depende mucho de las personas que las integran. En las que sus miembros son conscientes de la importancia de las nuevas tecnologías, hay un esfuerzo por ir en esa dirección. Sin embargo, dentro de la misma ONG se da el caso de que un departamento no tiene capacidad, conocimiento o motivación y parece que todavía andara con el ábaco ;)

No creo que pueda haber una sola respuesta a esta pregunta, como digo ;)

Son cotidianas las convocatorias de organizaciones sociales a sumarse para apoyar un proyecto de ley, el cumplimiento de alguna ya aprobada o de presión para la toma de alguna resolución, como sucedió con los activistas de Greenpeace encarcelados en Rusia.

El debate ya no está en si tenemos o no tenemos que estar en las redes sociales: debemos estar en ellas. Para ello, debemos conocer qué redes hay y cual se ajusta a nuestra necesidades. De este punto, puede parecer que lo complicado es conocer qué redes hay, pero no es así. Lo realmente complicado es saber:

por qué quiero estar en redes sociales
qué red de contactos deseo crear
qué información deseo compartir
qué información deseo obtener ¿A cuáles de estas preguntas podemos/sabemos responder?
¿Tenemos en mente más o menos qué respuesta daríamos
o sabemos claramente qué responder en cada una de ellas?

Una vez establecido este “destino” al que queremos llegar podremos establecer una hora de ruta que nos lleve a él. Para ello, veremos qué redes se adecuan a nuestras necesidades y cómo optimizar nuestro tiempo y presencia en ellas.

Hola,

Creo que el debate es muy acertado. Un debate amplio implica amplios aspectos a considerar.

Primero desde un enfoque conceptual, y luego desde otro más práctico. Imaginamos al referirnos a las “nuevas tecnologías de la información” que todos usamos este concepto con la misma definición. Sin embargo es un concepto paraguas que admite muchas cosas.

Además de lo obvio las nuevas tecnologías son principalmente las que han originado el concepto cosmopolita de la red y la interconexión de sus usuarios.

Para que las ONG puedan utilizar e instrumentalizar algo deben saber para qué se utiliza. Y decir para que sirven las nuevas tecnologías de la información es algo complejo.

Identificar funcionalidades de las nuevas tecnologías de la información es importantísimo: la web se puede utilizar con sus diversas sub-herramientas como un amplificador de comunicación clásica. Además permite adoptar entornos multimedia para poder comunicar mejor el trabajo que hacemos en nuestra organización. Las tecnologías modernas facilitan pero no sustituyen un trabajo de organización y sensibilización que es imprescindible.

Hay una tendencia obvia a estar presente en muchas plataformas de las redes sociales sin ningún objeto claro. La primera parte del trabajo es asumir la memoria de proyectos y planes anuales, una vez realizados la promoción ayuda a los objetivos centrales.

Las nuevas tecnologías de la información son meras herramientas, y aunque el medio determina parte del mensaje, no lo sustituye.

Opino que como muy bien comenta María Hidalgo, hay que plantearse las preguntas adecuadas, una vez realizadas viene una fase de trabajo de comunicación, donde el diseño de una buena estrategia es preciso. Ahí entra el trabajo de diseñar un plan de comunicación, como mínimo algo esencial, y cuando se ejecute este plan, es cuando se empieza el denominado “plan de medios”, y en esos medios es donde se ubica el amplio espectro de las nuevas tecnologías de la información.

Cómo se comunica es importante, pero esencialmente el “qué” es lo que marca la diferencia. Frente al consumismo exacerbado y la tendencia de mercantilizarlo todo, las ONG desempeñan un papel crucial en el desafío de inventar un nuevo mundo sin tanta polaridad social. Enfoquemos lo positivo: Hay mucha cultura colaborativa y debe utilizarse como proceso enzimático de los procesos y proyectos de las ONG. Grandes aliados son las nuevas tecnologías, que son nuevas por girar en torno a las tecnologías del silicio y de Internet.

El diseño aplicado de comunicación es lo que ayuda visual y conceptualmente a que las herramientas “modernas” ayuden y apoyen la labor de las ONG.