¿Microseguros en el primer mundo?

El próximo día 29 de octubre en Madrid expondremos ante la industria aseguradora y la Sociedad un tema que hasta ahora no ha sido abordado en la orgullosa Europa. De la mano de reconocidos expertos españoles e internacionales iremos desgranando el término “microseguro” que pocos conocen y menos aún esperaban ver aterrizar en la rica CE.

Autor: Carlos Lluch – Titulado en Seguros y miembro de Community of Insurance

El microseguro no es un seguro low-cost, ni de escasa cobertura. No es un seguro, para entendernos, como el de Responsabilidad Civil del cazador que tiene una cobertura pequeña y puede adquirirse por muy pocos euros ni algo que nos vendan barato en Internet.

Cuando hablamos de microseguros nos referimos a soluciones de seguro que están destinadas a solucionar problemas o necesidades aleatorias de una población desfavorecida o claramente situada en el umbral de la pobreza. También reciben esta denominación soluciones muy simples destinadas a apoyar pequeños emprendimientos que carecen de recursos financieros con que adoptar soluciones estándar tal cual hacen en finanzas los microcréditos.

El ajuste de coste de las soluciones de microseguro se obtiene gracias a una optimización extrema de los gastos de gestión y de distribución del seguro. Otra característica es la claridad y sencillez de la cobertura que no puede generar expectativas insatisfechas dada la precariedad de la persona asegurada: el microseguro está diseñado para funcionar sí o sí. Además la solución debe ser aportada con carácter inmediato. No hay fuente alternativa.

El microseguro, como cualquier otro seguro, no funciona ante riesgos ciertos. Precisa aleatoriedad y un comportamiento estadístico para que sea sostenible. Por ello se debe enfocar a solucionar situaciones posibles, que generan una pérdida, pero no ciertas, inevitables. A cambio su gran ventaja financiera consiste en asumir esas pérdidas posibles a un coste fijo, presupuestable.

Para la ONG, en un entorno en donde las fuentes de financiación se tornan cada vez más escasas y difusas, puede ser de gran ayuda contar con un socio financiero llamado microseguro que la ayude a cumplir su misión a coste fijo, presupuestable, donde el gasto final de la prestación es incierto y su distribución aleatoria. En muchos países del 3er mundo ya conocemos cómo estos microseguros ayudan a la gente a sobrevivir o a disfrutar ciertas prestaciones que de otro modo resultarían inaccesibles para sus ingresos. Podemos encontrar fuentes de éxito en el área de la salud, en la protección de la orfandad, de apoyo a pequeñas iniciativas mercantiles o industriales, etc.

Según The Times “Que un 27,2% de niños en España viva en la pobreza y con hambre es alucinante. Pero está pasando”, mientras que eleconomista.es denuncia que cada tres minutos tenemos un niño que pasa a ser pobre. Todo ello combinado con el índice de desahucios, el tratamiento que reciben los inmigrantes, el difícil acceso a la Justicia, la pérdida del derecho a tarjeta sanitaria y el enorme drama del paro nos sitúa en un escenario demoledor que justifica por sí solo la enorme y hermosa tarea de miles de ONG. *Hasta ahora la única alternativa eran los donativos y las subvenciones *pero a partir de ahora espero que incorporen otro término, otra solución que permita desarrollar su misión humanitaria : el microseguro.

La imagen es de Cristina E en Flickr