¿Cuál de estas dos opciones es la más adecuada para que el tesorero deje la asociación?

Hola,

Soy la Presidenta de una Asociación creada para ayudar a personas afectadas de una enfermedad congénita, con ámbito autonómico.

En su día un familiar y yo estuvimos de acuerdo en constituirla, y casualmente, un conocido mío, se ofreció a ser el tercer socio fundador. De este modo, mi familiar y yo somos secretario y presidenta, y este individuo, el tesorero.

La Asociación nació en el año 2014. Todavía no hay socios, estamos los tres miembros de la Junta Directiva. En el banco, únicamente 50,00 € aportados por un amigo.

Todo el trabajo lo estoy llevando yo misma, y también el logo y el nombre fueron cosa mía. Pero poco después de comenzar nuestra andadura, mi socio, el tesorero, comenzó a darme problemas, pues es una persona con un carácter difícil, y me falta al respeto constantemente, además de tratarme con agresividad.

Todo esto se agravó en los últimos dos meses, comenzamos a distanciarnos, y hace unos días tuvimos una discusión, en la que le invité a irse de la Asociación, a tenor de las muchas pegas que pone a todo lo que se hace (sin aportar nada por su parte).

Se debió sentir herido en su orgullo, de modo que me dijo que estaba metido en unos proyectos, y que pensaba terminarlos para luego irse. Lo que pretende hacer son cosas que he estado gestionando yo, y me pregunto hasta qué punto puede tomar la determinación de llevar a cabo proyectos por su cuenta con los que no estoy de acuerdo. El voto de mi familiar es simbólico, lo que yo haga va a misa, este familiar mío está en la directiva a título simbólico, y siempre está de acuerdo con lo que emprendo.

Estoy en una situación delicada, porque este tipo empieza a darme miedo con su agresividad. He pensado en dos posibles soluciones, os agradecería que me dijerais cuál veis más adecuada.

Primera: basándome en un artículo de los estatutos, expulsar a este tipo, y nombrar una nueva persona en su lugar. Os pongo dicho artículo:
Artículo:
La Asamblea General Extraordinario tratará de los temas específicos en el orden del día de su convocatoria. Será de su competencia exclusiva:
a) Adoptar acuerdos sobre disposición, enajenación y gravamen de bienes inmuebles y valores.
b) Nombrar y revocar a los miembros que han de formar parte de la Junta Directiva.
c) Aprobar la modificación de los Estatutos de la Asociación.
d) Acordar la integración en una Federación de Asociaciones. O decidir su fusión con otra y otras de similar cometido, ya sean de ámbito regional o nacional.
e) Decidir sobre la disolución de la Asociación.
Para la adopción de los acuerdos reseñados en los cinco anteriores epígrafes, será necesario en todo caso, el voto favorable de las dos terceras partes de los asociados presentes o representados.

La segunda solución, sería más informal. Yo creo que si le comunico al tipo que, tanto mi familiar como yo abandonamos la Asociación por estar en desacuerdo con su comportamiento, él se acabará rindiendo y se apartará de todo, presentando su renuncia. De este modo, yo seguiría mi trabajo hecho hasta ahora, que es mucho, formando una nueva Asociación. Entiendo que él dejará “morir” la anterior, porque no tiene ni idea de estas enfermedades, ni conoce a nadie del entorno, ni nada en absoluto. Tiene su propio trabajo, y dudo que pierda mucho tiempo más en asuntos que no le conducen a ninguna parte.

¿Qué me decís? Quiero una solución rápida y con las mejores garantías y menores problemas.

Muchas gracias.