Evolución de la cooperación al desarrollo
La cooperación internacional ha evolucionado de forma considerable desde que en la década de los sesenta se pusieran en marcha las primeras políticas institucionalizadas de Ayuda Oficial al Desarrollo.
En esos años se consolida un sistema de cooperación para el desarrollo basado en las relaciones bilaterales de los países con sus antiguas colonias y en la expansión de la cooperación multilateral a través de los bancos regionales de desarrollo (en 1960 se crea el Banco Interamericano de Desarrollo, en 1964 el Banco Africano de Desarrollo y en 1966 el Banco Asiático de Desarrollo) y la firma de acuerdos de integración económica y comercial.
En esos años los donantes perseguían el desarrollo económico de los países en desarrollo, llevando a cabo proyectos de creación o fortalecimiento de infraestructuras y asociaciones.
En los años setenta comienza a abrirse paso la idea de la satisfacción de las necesidades humanas básicas poniéndose en marcha programas dirigidos a la reforma económica o al ajuste estructural. Sin embargo son años marcados por la crisis económica originada por la subida del precio de las materias primas, especialmente del petróleo, el conflicto palestino-israelí y la crisis de los rehenes norteamericanos en Irán, lo que lleva a un menor crecimiento económico de los países desarrollados y una reducción de la demanda de materias primas de los países en desarrollo.
En 1995 el Comité de Ayuda al Desarrollo introduce el concepto de asociación en la cooperación basado en el convencimiento de que el desarrollo sólo obtendrá resultados positivos si responde a la voluntad de todas las partes implicadas y se centra en la lucha contra la pobreza respetando un cierto número de valores tales como derechos humanos, participación democrática, justicia social o conservación de los recursos naturales.
En el año 1996 se acuerda una agenda común para la actuación de los donantes basada en los compromisos adquiridos en la Cumbres y Conferencias Internacionales promovidas por las Naciones Unidas entre las que destaca la Cumbre de Copenhague sobre Desarrollo Social (1995) en donde se consagra el concepto de desarrollo humano concentrándose en tres problemas fundamentales como son la pobreza, el desempleo y la exclusión social, fijándose metas específicas que debían cumplir tanto los donantes como los receptores.
En el año 2000 se define la llamada Estrategia de Asociación para el Desarrollo en los que se fijan los grandes objetivos de desarrollo a alcanzar antes del 2015:
- Reducción a la mitad del porcentaje de población que vive en extrema pobreza en 1990.
- Enseñanza primaria para todos en el 2015 e igualdad de géneros en la enseñanza primaria y secundaria para el 2005.
- Reducción en dos tercios de la tasa de mortalidad de los recién nacidos y los niños pequeños.
- Reducción de la mortalidad materna en tres cuartos entre 1990 y el 2015 y acceso universal a los servicios de salud reproductivas.
- Aplicación para el 2005 de estrategias nacionales de desarrollo sostenible con la finalidad de invertir para el 2015 la tendencia actual de pérdida de recursos naturales.
- Desarrollo participativo, democratización, buena gestión de los asuntos públicos y protección de los derechos humanos.
Se trata de objetivos que están siendo paulatinamente asumidos por la mayoría de instituciones y agencias donantes que están reorientando sus políticas en función de los mismos.